viernes, 2 de octubre de 2009

Hola!! Subí algunos trabajos del segundo cuatrimestre, los anteriores no porque se me borraron de la compu a causa de un virus. Apenas tenga tiempo de copiarlos los subo!!
La reflexión de los viajes
El texto de Diego Tatian es de tipo reflexivo y está orientado a un público que acostumbra leer, ya que en los primeros y últimos párrafos el autor hace referencia a bastantes autores y sus textos sobre viajes como por ejemplo Lévi- Strauss y Franz Kafka.
El autor provoca hacer reflexionar al lector sobre su propia vida, más precisamente sobre el aprovechamiento del tiempo de vida, sus vacaciones, la diversión y sobre como el capitalismo domina parte de esto en nuestra existencia.
Estoy de acuerdo cuando se acusa al turismo de ser el negocio del desplazamiento masivo y una creación del capitalismo. Pero igualmente me gustaría entrar a un supermercado y ganarme y un viaje a Camboriu o Cancún.
No coincido en que todos los viajes son una pérdida de tiempo, quizá si pueda encontrarse la misma diversión que a la vuelta de tu casa solo en algunos viajes. Pero el cambio de “aire” siempre ayuda a disfrutar un poco más de esa diversión.
El texto es breve, interesante y genera entusiasmo al leerlo, en tan pocos párrafos logra al lector una gran reflexión sobre ítems de su propia organización en la vida.
Viajes en la historia
El texto de Marie Louis Pratt, capítulo 2 del libro Ojos imperiales comienza con dos citas textuales d diferentes autores. Estos fragmentos resultan interesantes y atrapantes, algo que no se logro a lo largo del texto.
Las primeras páginas parecen ser un texto histórico interesante, trata sobre la cartografías, a lucha por dominar el conocimiento del planeta y las rivalidades entre algunas naciones europeas. Luego parece tomar otro rumbo, el de la literatura de los viajes. Aquí la atención ya comienza a dispersarse y resulta poco interesante la lectura.
El comienzo del tercer subtitulo parece no tener relación con lo leído anteriormente, ya que comienza a tratarse la botánica hasta que se llega al tema central nuevamente, el viaje.
El capitulo me pareció aburrido y poco lineal con el tema central.

Mitos y Psicoanálisis
El texto de Josep Campbell El héroe de las mil caras trata sobre los mitos y el psicoanálisis. Con la teoría de Freud se analizan algunos mitos y sueños.
Es un texto de Psicología pero no solo para gente profesional ya que tiene una lectura entendible y entretenida. A lo largo de la narración se cuentan historias mitológicas y sueños de personas comunes o reconocidas y se los las analiza, por lo que cada lector puede sentirse identificado con cualquiera de los mitos o sueños que se interpretan.
Se utilizan metáforas que embellecen la lectura, no se agrega información de más ni tampoco hay de menos. Un texto equilibrado y apasionado.
“No por mucho desfilar, se envejece más temprano”
Carola era una joven de 25 años, modelo, famosa, exitosa, diva por naturaleza. De perfil conservador, Despegaba glamur camine por donde camine. Era tapa de revista al menos una vez por mes. Vestida por los mejores diseñadores de alta costura Nacional y Europea lograba lucir cada prenda que vestía.
Pero una mañana todo cambió, su vida y su carrera estaban al punto del derrumbe. Habían llegado ellas, a quienes tanto temía, el horror de la pasarela. Sin preámbulos, sin previo aviso. Se colocaron allí como si fuera lo más natural del mundo. Las líneas de expresión se habían apoderado de su rostro, hasta casi parecer arrugas.
Sentada frente al espejo, comenzó a llorar con furia, tiro con furia todo lo que se encontraba al alcance de su mano, y no era para menos, estaba vieja para la moda. Los años de su vida útil estaban por terminar. Había que comenzar a olvidar volver a ser tapa de alguna revista. Las Modelos eran cada vez más jóvenes y voluptuosas y ese no era su estilo.
Desesperada llamó a su representante para pedir socorro. Inmediatamente el hombre la llevó al cirujano plástico quien también le consejo “achicar un poco por acá y agrandar un poco por allá”, acepto sin pensarlo porque se sentía encerrada en ese cuerpo de anciana.
Ante tantas cirugías, para lograr ser como las chicas nuevas del circuito, Carola tuvo que desaparecer del ruedo durante un mes. Las revistan comentaban que se había ido del país a un Spa a causa del stress que le había provocado tanta fama. Pero que regresaría para el desfile más importante del año.
Así fue, entusiasmada por su nueva figura provocativa, su rostro plástico de adolescente llegó a los camarines. Todos estaban fascinados con su nueva imagen, su ego comenzaba a agrandarse, miraba con desprecio a las demás modelos, sintiéndose superior, invencible.
Antes de salir a las tablas, el representante llamó a Carola para comentarle que estaban lloviendo propuestas de trabajo, que era hora de cambiar el perfil. Entusiasmada por las noticias volvió rápido a su camarín pero se encontró con una gran sorpresa, había desaparecido la ropa que usaría en el desfile. Comenzó a gritar, hasta que una colega se acercó y le comentó lo que había ocurrido: “ya no serás la figura del desfile, porque este año se vienen los rollitos y la cara al natural, nada de implantes mami, cuerpos reales”, Igual quédate tranquila que me entere que te están pretendiendo de los canales eróticos”.
IDA ONCE
Moreno-Paso del Rey-Merlo-San Antonio de Padua-Ituzaingó-Castelar-Morón-Haedo-Ramos Mejía-Ciudadela-Liniers-Villa Luro-Floresta-Flores-Caballito-Once. Treinta y seis kilómetros y quince estaciones es lo que recorre el ex ferrocarril Sarmiento, actual TBA. El tren traslada pasajeros desde el oeste del conurbano bonaerense hasta la Ciudad de Buenos Aires.
Hoy es jueves y me propongo viajar como de costumbre al trabajo, son las 7:30 AM y todavía está oscuro, cuando estoy llegando a la estación del ferrocarril, veo que hay dos formaciones de trenes, algo inusual y me apuro para ver si puedo conseguir algún asiento, pero otra persona también pensó lo mismo y me empuja para pasar los molinetes primero, los salta, el guarda le grita, le exige el boleto, pero el joven corre hacia el andén sin importarle. Fue en vano su actitud, los vagones del tren con calefacción ya estaban repletos, ya no entraba ni una mosca y era buen motivo para subir ya que el termómetro marcaba cinco grados de temperatura en la ciudad.
Me llamó la atención tanta gente parada, había mucha más que de costumbre, pero igual subí porque todavía había espacio. Cabe aclarar que a pesar que de que los trenes sean locales de Moreno vienen con el 80% de los asientos ocupados porque muchas personas deciden tener media hora más de viaje pero viajar sentados y sin sufrir golpes, tomando el tren primero con destino a Moreno y desde de allí, sentados en el mismo asiento, esperar que la formación férrea en que llegaron, parta hacia Once.
En ese momento suenan los parlantes y escucho que los trenes funcionan solo de Merlo a Once por un accidente próximo a Merlo. Bajo del tren, pero soy una de las pocas que lo hacen. Las personas que estaban sentadas deciden tomar sus bolsos, taparse el rostro con la bufanda y dormir, al igual que lo hacen cada mañana a pesar de que el tren salga. Le pregunto a un guarda cuanto tiempo habría de demora y contestó “por lo menos dos horas.”
Decido salir del andén para tomarme algún colectivo. Aunque muchos viajeros no lo hagan, porque el tren es el medio de transporte más económico y rápido. Viajar cómodamente en algún colectivo de la línea 57, directo a Palermo cuesta casi un 350 % más, conseguir un buen trabajo cerca de tu casa es como ganar la lotería. La mayoría de los que viajan diariamente compran el boleto mensual, pagar otro viaje mas es muy oneroso. Otra opción es tomarse un colectivo a Merlo y de allí tomar el tren, esta es la más elegida por la gente, llegar allí cuesta lo mismo que un boleto de tren a Once y así, aún sigue siendo más barato que tomar el 57. Pero la incertidumbre sigue en pie, ¿esperar a que el tren salga? ¿En cuánto tiempo? O ¿ir hasta Merlo y encontrarte con la posibilidad que el tren tampoco salga desde ahí?
Luego de tantas preguntas, decido viajar en el 57. Salgo del andén, veo a personas ir de un lado, para el otro, la mayoría se quedan dentro de la estación En ese momento escucho por el parlante que el tren de plataforma uno se encuentra próximo a partir. Vuelvo al andén y busco un nuevo recoveco en un vagón de la formación de plataforma dos. El tren con calefacción, parte. Cada vez hay más gente, pasajeros callados y acostumbrados, esperando que el medio de transporte más económico y rápido, cuando funciona bien, los lleve a destino.
Por el parlante se vuelve a oír la voz de una mujer: los trenes funcionan de Merlo a Once, la gente que estaba parada comienza a impacientarse, a quejarse y a preguntarse qué hacer. Otra voz se escucha aclarando que de Moreno a Merlo funciona en forma condicional. La gente se tranquiliza, en algún momento saldrá el tren.
En los asientos muchos siguen durmiendo, algunos ni se enteran que está pasando, al llegar a destino la empresa les entregará, a pedido, los certificados de atraso a causa de los inconvenientes del viaje.
Vuelve la voz a escucharse por el parlante, pero esta vez decía algo distinto. Lo decía tímidamente como si le diera vergüenza, una risita nerviosa se escucho entre sus palabras: Trenes sin servicio por nuevo accidente en paso de Rey. La gente comenzó a reír. ¿Algo más nos podría suceder?
Nuevamente me pregunto cómo viajar y empiezo a investigar en mi Guía T.
Hoja 2/5 - Sabrina Valenzuela
Hoy es viernes y espero que no ocurra lo de ayer. Llego al andén, no hay ningún tren pero desde el puente peatonal de acceso a la estación veo que uno se aproxima, la gente se amontona en el lugar donde se abrirá cada puerta, me alejo, el tren está llegando, se encuentra a unos metros de frenar, la gente se desespera, se empuja. En ese instante recordé una escena de una película de Jackie Chan, porque en mi película una señora, víctima de los empujones de los ansiosos, intenta no caerse a las vías apoyándose en el tren y lo peor, antes de que este se detenga. En estos casos, una puede salir lastimada inclusive muerta si me empujaran a las vías antes que pase el tren. Prefiero estar una hora y quince minutos parada durante el viaje antes que ser golpeada por buscar un asiento o correr el riesgo de sufrir algo peor.
El tren para, abre sus puertas, la gente entra enfrentándose con los que quieren bajar. Se gritan, se chocan. Es la ley de la selva ganan los más fuertes. Hombres y mujeres de entre 20 y 50 años. Es una batalla por un asiento, pocos los consiguen. Espero que la lucha finalice. Entro, me quedo parada en el pasillo lo más alejada posible de la puerta para luego no ser aplastada. Una mujer se levanta y me dice que me siente porque su recorrido termino. Le pregunto porque tardo tanto en bajar y me confesó: “Prefiero esperar para bajar, antes que darle el lugar a estos bestias”. Le agradecí por su amabilidad y me senté.
El tren arranca, se nota quienes bajan pronto y quienes no de aquellos que están sentados. Los primeros van con los ojos abiertos mientras los segundos duermen. Algunos hablan pero solo los que están parados.
Primera estación, Paso del Rey, la gente sube corriendo buscando de donde agarrarse, el tren no va tan lleno. En Merlo, las personas suben rápido tratan de encontrar algún pasamano entre la multitud, ahora sí, el tren está repleto. Sigue Ituzaingó, Padua y Castelar, allí solo algunos pueden o prefieren entrar, la mitad de la gente que estaba esperando en el andén, los demás se empujan y amontonan, muy pocos bajan. Pero la próxima estación es la aterradora Morón, a veces pienso que afortunada soy al subir en Moreno. Ya no hay más lugar, la gente se empuja aplasta a otros, unos toman carrera y hombrean a los demás para hacer lugar.
Hoja 3/5 - Sabrina Valenzuela
Una mujer grita porque la golpearon contra la baranda. Alguien le grita: ¡tomate taxi si querés viajar cómoda! Otros la defienden. Por el parlante piden que no traben las puertas o el tren no arrancará. Más aprietan y las puertas cierran, el tren arranca. En el medio del pasillo se viaja apenas mejor.
En Ramos Mejía bajan algunos, los suspiros de alivio se escuchan. Ya en la estación Liniers bajan muchos, algunos se sientan, aunque todavía son muchos los que quedan parados.
En Flores la gente comienza a despertar de su siesta de una hora. Llegamos por fin a Once, lo curioso de este viaje abrumador, es que ningún vendedor subió desde que el tren arrancó. Puedo decir que ese fue un día normal de Junio a partir de las 7:30 de la mañana.
Algo totalmente diferente es viajar a las 9, donde se desplazan pocas personas, recién en Merlo se pelean por un asiento, en Morón se ve más movimiento y en todas las estaciones baja y sube gente. El recorrido dura 15 o 20 minutos menos que dos horas antes. Aquí el tren se va convirtiendo de a poco en un mercado ambulante, donde desfilan los vendedores por los pasillos ofreciendo sus ofertas como buenos oradores, cada uno con un estilo diferente, con cantitos o arrastradas o con largos discursos. Los artistas despliegan su música, generalmente folclore, con mini recitales baratos, tan solo por las pocas monedas que algunos pasajeros les dan. Por momentos parece un Teatro. No obstante, pasan por el mismo lugar mujeres embarazadas, o embarazadas y con sus hijos en brazos, hombres desocupados y también gente enferma pidiendo monedas para poder sobrevivir. En ese horario es raro ver niños solos mendigando o vendiendo estampitas, algo que me parecía muy usual hace tan solo un año cuando viajaba al mediodía, quizás sea porque a esa hora viaja menos gente y el tránsito por los vagones es más fluido y la comunicación más car-nal y personal.
El Ferrocarril es un mundo muy particular, y en cada hora existe un mundo distinto.

sábado, 15 de agosto de 2009

Moreno-Once
Moreno-Paso del Rey-Merlo-San Antonio de Padua-Ituzaingo-Castelar-Morón-Haedo-Ramos Mejia-Ciudadela-Liniers-Villa Luro-Floresta-Flores-Caballito-Once. Estas son las estaciones que recorre el ferrocarril ex Sarmiento, actual TBA. El tren traslada pasajeros desde el oeste del conurbano bonaerense hasta la Ciudad de Buenos Aires.
Hoy es jueves y me propongo viajar como de costumbre al trabajo, son las 7:30 AM cuando estoy llegando a la estación de tren. Veo que hay dos trenes, algo inusual y me apuro para ver si puedo conseguir algún asiento, pero otra persona también pensó lo mismo y me empuja para pasar los molinetes primero, el guarda le grita pero el joven corre hacia el tren. Fue en vano su actitud, había un tren repleto en el cual no entraba una mosca. Seguramente saldría primero, además poseía calefacción y era buen motivo para subir a aquel ya que hacia 5 grados en la ciudad.
Me llamo la atención tanta gente, subí al tren en cual podías entrar, por supuesto parado. Lo que ocurre es que a pesar de que los trenes son locales de Moreno, viene con el 80% de los asientos ocupados, porque en las 3ra estación ya no entran más personas, a pesar de ir colgados en las puertas.
En ese momento escucho por los parlantes que los trenes funcionan solo de Merlo a Once por accidente próximo a Merlo. Decido bajar del tren pero soy una de las pocas, Las personas que estaban sentadas decidieron tomar sus bolsos, taparse el rostro con la bufanda y dormir, al igual que lo hacen cada mañana a pesar que salga el tren. Le pregunto a un guarda cuanto tiempo habría de demora contesto que por lo menos dos horas.
Decido salir del andén para tomarme algún colectivo. No mucha gente lo hace, es que el tren es el medio de transporte más económico y rápido. Viajar cómodamente en el 57 cuesta un 8 % más, conseguir un buen trabajo cerca de tu casa es ganar la lotería, Además la mayoría de los que viajan diariamente compran el boleto mensual. Otra opción es tomarse un colectivo a Merlo y de allí tomar el tren, esta es la más elegida por la gente, llegar allí cuesta lo mismo que un boleto de tren, es aun más barato que un colectivo directo al centro. Pero la incertidumbre sigue en pie, ¿esperar a que el tren salga? ¿En cuánto tiempo? O Ir hasta Merlo y encontrarte con la posibilidad que el tren haya antes de llegar a la estación en cuestión.
Luego de tantas preguntas, decidí viajar en el 57 por un día, salgo del andén, veo a personas ir para un lado, otras para el otro, la mayoría se quedan en el tren. En ese momento escucho por el parlante que el tren se encuentra próximo a partir. Vuelvo a entrar. Subo al mismo tren, el otro sale. Cada vez más gente, callados, acostumbrados. Esperando que el medio de transporte más económico los lleve a destino.
Por el parlante se vuelve a oír la vos de una mujer: los trenes funcionan de Merlo a 11, la gente que estaba parada comienza a impacientarse. Otra vos se escucha aclarando que de Moreno a Merlo funciona diferencialmente. La gente se tranquiliza, en algún momento saldrá el tren.
En los asientos la gente sigue durmiendo, al llegar a destino la empresa les entregará los certificados de atraso a causa de atraso del tren. Me quedo parada 7 minutos mientras busco en mi guía t de qué forma me convendría llegar al trabajo. Tomar el colectivo directo era muy caro. Tomar un colectivo hasta Merlo y de allí tomar el tren era perder mucho tiempo. Esperar pacientemente era lo que hacíamos todos.
Vuelve una voz a escucharse por el parlante, pero esta vez decía algo distinto. Lo decía tímidamente como si le diera vergüenza, una risita nerviosa se escucho entre sus palabras: Trens sin servicio por nuevo accidente en paso de Rey. La gente comenzó a reír.
Hoy es viernes y espero no ocurra lo que ayer. Llego al andén, no hay ningún tren pero uno se aproxima, la gente se amontona en donde se abrirán las puertas, me alejo porque sé que en esos casos podes salir lastimada. Prefiero estar una hora y 15 parada durante el viaje a los golpes por buscar un asiento.
El tren está llegando, se encuentra a unos metros de parar, la gente se desespera. Se empujan, se apoyan en el tren antes de que frene. Recuerdo una escena de la película de Jackie Chan cuando una señora intenta no caerse apoyándose en el tren andando, 5 personas atrás empujando.
El tren para, abre sus puertas. La gente entra enfrentándose con los que quieren bajar. Se gritan, se empujan. Los más fuertes ganan. Hay hombres, mujeres, de entre 20 y 50 años. Es una batalla por un asiento. Pocos los consiguen. Espero que la lucha finalice. Entro, me quedo parada en el pasillo lo más alejada de la puerta posible para luego no ser aplastada. Una mujer se para y me dice que me siente que ella baja allí. Me siento, con otros que ocurre lo mismo. Pero no con quienes disputaban la lucha.
El tren arranca, se nota quienes bajan pronto y quienes no de los que están sentados. Unos duermen otros no. Hablan solo los que están parados. Primera estación, la gente sube corriendo buscando de donde agarrarse, el tren no va tan lleno. Merlo, las personas suben rápido buscando de algún lugar para agarrarse, el tren se llena. Castelar Sube solo la mitad de la gente que estaba esperando, los demás se empujan y amontonan. Muy pocos bajan. Pero llega la peor estación. Me hace sentir afortunada de subir en Moreno. Morón, no hay más lugar, la gente se empuja aplasta a otros unos toman carrera en empujan a los demás con los hombros para hacer lugar. Una mujer grita porque la golpearon contra la baranda. Uno le grita: ¡tomate taxi si querés viajar cómoda! Otros la defienden. Por el parlante piden que no traben las puertas o el tren no arrancará. Más aprietan, pero las puertas cierran y el tren arranca.
En Ramos bajan algunos, los suspiros de alivio se escuchan. En Liniers bajan mayoría, algunos se sientan, Muchos más quedan parados.
En Flores la gente comienza a despertar de su siesta de una hora. Llegamos a 11, ningún vendedor subió desde que el tren arrancó. Puedo decir que ese fue un día normal de Junio a las 7:30 de la mañana.
Algo totalmente diferente es viajar a las 9 de la mañana, donde viajan pocas personas, en Merlo se pelan por un asiento, en Morón hay intercambio de personas y en todas las estaciones baja y sube gente. El recorrido dura 15 o 20 minutos menos que dos horas antes. Aquí el tren se convierte en un mercado ambulante, donde desfilan los vendedores por los pasillos ofreciendo sus ofertas como buenos oradores, cada uno con un estilo diferente, con cantitos o arrastradas o con largos discursos. Allí también se apoderan del pasillo los músicos desplegando su música con mini recitales baratos, tan solo por unas pocas monedas de algunos. Por momentos parece un Teatro. Pero también pasan por el mismo lugar mujeres embarazadas, o con sus hijos en brazos, hombres desocupados, gente enferma pidiendo monedas para poder sobrevivir. En ese horario es raro ver niños solos mendigando, algo que era muy usual hace tan solo un año, quizá es solo el horario. Cada hora, un mundo distinto.

jueves, 6 de agosto de 2009

Hola!!
Me esta costando mucho escribir no se me ocurre mucho y lo que se me ocurre no me gusta. Voy a aprovechar para contar como surgio la idea de escribir sobre el viaje en el tren. Me vino a la mente hace mucho, por el mes de mayo cuando iba viajando en el colectivo y de la nada pensé es esto, y me pareció bueno para el proyecto del que hablaban las profes. Tomé notas varios días de junio y otros 3 de julio. No sabia como empezar a escribir, estuve una semana pensando y no empezaba. Pero una mañana estaba haciendo fiaca en la cama y comencé a redactar en mi mente la introducción. Me levanté y comencé a escribirla para no olvidarla y ese fue el primer parrafo que publiqué.
Luego fuí redactando las notas de los días de julio. Lo que quiero mostrar en este pequeño diario es la diferencia que existe en las distintas horas de viaje. El año pasado yo viajaba a la tarde para ir a la facu, solo hasta Merlo, y me parecia un lujo el tren no entendia tantas quejas por parte de los demas usuarios. Pero este año viajando en la hora pico descubrí el por qué.
Mis lineas no son muy extensas porque una de las consignas de Estela es que el proyecto no supere las tres hojas y media de escritura.
Apenas redacte algo lo subo... Besos!

viernes, 31 de julio de 2009

Hola!!
Habia escrito dos parrafos nuevos modificando una parte del texto, pero a mi compu le agarro un virus y no me guardo los cambios!!! asi que voy a escribirlo de nuevo este finde...
Aprovecho para agradecerles chicas!! sus comentarios me ayudan y orientan un monton!!

Besos!!

jueves, 23 de julio de 2009

Moreno-Paso del Rey-Merlo-San Antonio de Padua-Ituzaingo-Castelar-Morón-Haedo-Ramos Mejia-Ciudadela-Liniers-Villa Luro-Floresta-Flores-Caballito-Once. Estas son las estaciones que recorre el ferrocarril ex Sarmiento, actual TBA. El tren traslada pasajeros desde el oeste del conurbano bonaerense hasta la Ciudad de Buenos Aires. Miles de personas viajan en ella diariamente, yo soy una de ellas.Hoy es lunes de Junio, son las 9:25 de la mañana cuando me encuentro en Moreno y voy bajando las escaleras hacia el andén del tren de ferrocarril ex sarmiento junto a una amiga.Hay dos trenes parados, uno en cada plataforma, que son dos. No parecen pertenecer a una misma empresa. La diferencia entre un tren y otro es abismal, el que se encuentra en la plataforma nº 1, próximo a partir, esta despintado, con las ventanas abiertas y rotas. Se puede ver alguna puerta trabada, por esto decido subir al otro tren a pesar que aquel saldrá primero: una maquina nueva, pintada de violeta brillante, las ventanas están forradas con atireflex, posee asientos sanos y las puertas que conducen a los siguientes vagones parecen pertenecer a la película de la guerra de las galaxias, con apretar un botón se abren automáticamente. Pero lo más importante para este invierno, el tren posee calefacción.
Subo, busco un asiento y veo que la mitad están ocupados, muchos más que tren que partía primero. Me siento, pero no me había percatado que en el asiento que estaba frente a mi, un joven se encontraba estirado cómodamente, con los ojos cerrados y abrazando su mochila. Se percibía que no hacia mucho que estaba allí, porque parecía recién bañado, no era un chico de la calle que había dormido ahí. Este ocupaba el espacio para mis piernas, pero ya no podía cambiarme de lugar porque no quedaban dos lugares juntos y estaba acompañada. Con esto he notado que la mayoría de las personas se sientan del lado de la ventana.
El tren no arrancaba, un muchacho subió al vagón con su guitarra y sin previo discurso se paró en medio del pasillo como si fuera un escenario. Comenzó a tocar y cantar una canción popular que no recuerdo su titulo. El joven tenia talento, convirtió el tren en un recital, pero no mucha gente aplaudió su afinada interpretación, a pesar de que una gran mayoría tarareaba contento el tema al ritmo de la música. Pidió aplausos, simplemente eso, pero pocas personas sacaron sus manos del bolsillo. Siguió con otro tema, y al terminar este no solo pidió aplausos sino una colaboración, algunas monedas, ni una sexta parte de lo que costaría una entrada para cualquier recital. pocas personas le dieron monedas.
Antes deque este marchara un hombre con una caja se quedo parado en la esquina del vagón esperó que el músico se fuera y llegó su turno. Era un vendedor, se colocó en el medio del pasillo y recorriéndolo ofrecía pañuelos descartables con una vos roncosa y llamativa. El señor bajó y el tren arrancó.
Ya, con el tren en marcha, otra persona parecía apoderarse del pasillo, como si fuera un escenario en el que cada artista espera su tiempo y desfila promocionando su producto. En este caso el discurso del vendedor de atlas venia acompañado de una vos con arrastre en las ultimas letras de cada palabra.
Ni bien había terminado este, otro apareció, y tan solo habíamos llegado a la tercera estación, donde Personas de todas las edades, mujeres y hombres subieron apuradas buscando los últimos asientos que quedaban libres. Bastante quedaron paradas.
Llegamos a Castelar, cuando una mujer con un bebe en brazos pasó pidiendo monedas, algunas personas le dieron.
Lentamente el tren se iba llenando, Había personas que bajaban y otras subían pero la base era la misma. Los vendedores no aparecieron nuevamente hasta llegar a Flores. Debe ser porque el tren estaba tan repleto que no podían desfilar por el escenario. Pero de esta estación a11 el tren se volvió a convertir en un “mercado ambulante”, con muy buena ofertas.
Hoy es jueves y me propongo viajar como de costumbre al trabajo, son las 7:30 AM cuando estoy llegando a la estación de tren. Veo que hay dos trenes, algo inusual y me apuro para ver si puedo conseguir algún asiento, pero otra persona también pensó lo mismo y me empuja para pasar los molinetes primero, el guarda le grita pero el joven corre hacia el tren. Fue en vano su actitud, había un tren repleto en el cual no entraba una mosca. Seguramente saldría primero, además poseía calefacción y era buen motivo para subir a aquel ya que hacia 5 grados en la ciudad.
Me llamo la atención tanta gente, subí al tren en cual podías entrar, por supuesto parado. Lo que ocurre es que a pesar de que los trenes son locales de Moreno, viene con el 80% de los asientos ocupados, porque en las 3ra estación ya no entran más personas, a pesar de ir colgados en las puertas.
En ese momento escucho por los parlantes que los trenes funcionan solo de Merlo a Once por accidente próximo a Merlo. Decido bajar del tren pero soy una de las pocas, Las personas que estaban sentadas decidieron tomar sus bolsos, taparse el rostro con la bufanda y dormir, al igual que lo hacen cada mañana a pesar que salga el tren. Le pregunto a un guarda cuanto tiempo habria de demora contesto que por lo menos dos horas.
Decido salir del andén para tomarme algún colectivo. Cuando escucho por el parlante que el tren se encuentra próximo a partir. Vuelvo a entrar. Subo al mismo tren, el otro sale. Cada vez mas gente, callados, acostumbrados. Esperando que el medio de transporte más economico y barato los lleve a destino.
Por el parlante se vuelve a oír la vos de una mujer: los trenes funcionan de Merlo a 11, la gente que estaba parada comienza a impacientarse. Otra vos se escucha aclarando que de Moreno a Merlo funciona diferencialmente. La gente se tranquiliza, en algún momento saldrá el tren.
En los asientos la gente sigue durmiendo la siesta, al llegar a destino la empresa les entregará los certificados de atraso a causa de atrasao del tren. Me quedo parada 7 minutos mientras busco en mi guía t de que forma me convendría llegar al trabajo. Tomar el colectivo directo era muy caro. Tomar un colectivo hasta Merlo y de allí tomar el tren era perder mucho tiempo. Esperar pacientemente era lo que hacíamos todos. Vuelve una voz a escucharse por el parlante, pero esta vez decía algo distinto. Lo decía tímidamente como si le diera vergüenza, una risita nerviosa se escucho entre sus palabras: Trenes sin servicio por nuevo accidente en paso de Rey.
La gente comenzó a reír.
Hoy es viernes y espero no ocurra lo que ayer. Llego al andén, no hay ningún tren pero uno se aproxima, la gente se amontona en donde se abrirán las puertas, me alejo porque sé que en esos casos podes salir lastimada. Prefiero estar una hora y 15 parada a los golpes por buscar un asiento.
El tren esta llegando, esta a unos metros de parar, la gente se desespera. Se empujan, se apoyan en el tren antes de que pare. Una señora intenta no caerse apoyándose en el tren andando, 5 personas atrás empujando.
El tren para, abre sus puertas. La gente entra enfrentándose con los que quieren bajar. Se gritan, se empujan. Los más fuertes ganan. Hay hombres, mujeres, de entre 20 y 50 años. Es una batalla por un asiento. Pocos los consiguen. Espero que la lucha finalice. Entro, me quedo parada en el pasillo lo más alejada de la puerta posible para luego no ser aplastada. Una mujer se para y me dice que me siente que ella baja allí. Me siento, con otros que ocurre lo mismo.
Comienzan a subir los vendedores de siempre: los que venden caramelos, la señora con el carrito y el señor grandote con el parche en el ojo, y el diariero. Bajan.
El tren arranca, se nota quienes bajan pronto y quienes no de los que están sentados. Unos duermen otros no. Hablan solo los que están parados Primera estación, la gente sube corriendo buscando de donde agarrarse, el tren no va tan lleno. Merlo, las personas suben rápido buscando de algún lugar para agarrarse, el tren se llena. Castelar Sube solo la mitad de la gente que estaba esperando, los demás se empujan y amontonan. Muy pocos bajan. Pero llega la peor estación. Me hace sentir afortunada de subir en Moreno. Morón, no hay más lugar, la gente se empuja aplasta a otros unos toman carrera en empujan a los demás con los hombros para hacer lugar. Una mujer grita porque la golpearon contra una baranda. Alguien dice: ¡tomate taxi si querés viajar cómoda! Otros la defienden. Mientras, por el parlante piden que no traben las puertas o el tren no arrancará. Más aprietan, las puertas cierran y el tren arranca.
En Ramos bajan algunos, los suspiros de alivio se escuchan. En Liniers bajan mayoría, algunos se sientan, Muchos más quedan parados.
En Flores la gente comienza a despertar de su siesta de una hora. Llegamos a 11, ningún vendedor subió desde que el tren arrancó. No parece ser el mismo tren que dos horas después se convertiria en prácticamente un mercado de ofertas.
Finalmente puedo decir, que sí, fue un día normal de julio a las 7:30 de la mañana.

jueves, 16 de julio de 2009

Moreno-Paso del Rey-Merlo-San Antonio de Padua-Ituzaingo-Castelar-Morón-Haedo-Ramos Mejia-Ciudadela-Liniers-Villa Luro-Floresta-Flores-Caballito-Once. Estas son las estaciones que recorre el ferrocarril ex Sarmiento, actual TBA. El tren traslada pasajeros desde el oeste del conurbano bonaerense hasta la Ciudad de Buenos Aires. Miles de personas viajan en ella diariamente, yo soy una de ellas.
Hoy es lunes primero de Junio, son las 9:25 de la mañana cuando me encuentro en Moreno y voy bajando las escaleras hacia el andén del tren de ferrocarril ex sarmiento junto a una amiga.Hay dos trenes parados, uno en cada plataforma, que son dos. No parecen pertener a una misma empresa. La diferencia entre un tren y otro es abismal, el que se encuentra en la plataforma nº 1, proximo a partir, esta despintado, con las ventanas abiertas y rotas. Se puede ver alguna puerta trabada, por esto decido subir al otro tren a pesar que aquel saldrá primero: una maquina nueva, pintada de violeta brillante, las ventanas están forradas con atireflex, posee asientos sanos y las puertas que conducen a los siguientes vagones parecen pertenecer a la película de la guerra de las galaxias, con apretar un botón se abren automáticamente. Pero lo más importante para este invierno, el tren posee calefacción.
Subo, busco un asiento y veo que la mitad están ocupados, muchos más que en el tren que partía primero. Me siento, pero no me había percatado de que en el asiento que estaba frente a mi, un joven se encontraba estirado cómodamente, con los ojos cerrados y abrazando su mochila. Se percibía que no hacia mucho que estaba allí, porque parecía recién bañado, no era un chico de la calle que había dormido ahí. Este ocupaba el espacio para mis piernas, pero ya no podía cambiarme de lugar porque no quedaban dos lugares juntos y estaba acompañada. La mayoría de las personas se sientan del lado de la ventana.

viernes, 10 de julio de 2009

Moreno-Paso del Rey-Merlo-San Antonio de Padua-Ituzaingo-Castelar-Morón-Haedo-Ramos Mejia-Ciudadela-Liniers-Villa Luro-Floresta-Flores-Caballito-Once. Estas son las estaciones que recorre el ferrocarril ex Sarmiento, actual TBA. El tren traslada pasajeros desde el oeste del conurbano bonaerense hasta la Ciudad de Buenos Aires. Miles de personas viajan en ella diariamente, yo soy una de ellas.

jueves, 28 de mayo de 2009







El libro prestado

Era un día de clases normal, corría el mes de noviembre y estaba en tercer año del polimodal, el último para terminar la escuela. Dos semanas antes habíamos vuelto del viaje de estudio a Bariloche que hicimos con el colegio, por esta razón nuestra atención estaba muy dispersa, sólo hablábamos de lo bien que la habíamos pasado semanas atrás.
Pero llego la hora de lengua y literatura, la materia más aburrida. La semana anterior habían empezado a leer “El túnel” de Ernesto Sábato pero yo había faltado. Como siempre entró la profesora al aula y comenzaron con la lectura en la página que había terminado la última clase. Intente escuchar con atención sobre que se trataba la historia del libro pero no lograba comprender totalmente el cuento, es que me había perdido el principio, por lo cual me resigne y deje que mi atención se dirija a cualquier otra cosa.
A día siguiente recordé que mi amiga, que vivía frente a mi casa, tenía el cuento de Sábato por lo cual se lo pedí prestado ya que debía leerlo para la semana próxima porque era el examen de literatura.
Comencé a leerlo como una obligación pero fue más atrapante de lo que imaginé. Termine el libro en tan solo una noche, no quería esperar para saber lo que ocurriría con el protagonista de cuento: un pintor introvertido, muy calculador que se obsesiona con María la única mujer que había logrado comprender el significado de una de sus obras. Quería saber hasta que punto llegan algunas personas cuando se obsesionan con alguien e inventan historias en sus cabezas que nunca existieron, porque viven en sus propios túneles oscuros que no le permiten ver más allá de su propia realidad.
Así la lectura paso de ser una obligación para la escuela a ser una apasionante historia. Finalmente el día de la lección llegó y fui la primera en dar el examen oral, la nota fue de excelencia y hasta me sirvió para no realizar la última evaluación del año ya que fui unas de las pocas que dio el examen.
El año lectivo había terminado las lecturas también, pero el libro seguía en mi biblioteca porque sabía que algún día volvería leerlo y ese día será devuelto a su dueña.




“La obra”

Pasaba el mes de agosto y Juan estaba sentado en la plaza frente a la puerta del teatro de la gran ciudad. Todas las tardes de los días jueves allí se sentaba y miraba pasar a gente que entraba y salía del lugar. Soñaba que algún día él sería una de esas personas. Que sus obras serían exitosas por llegar al corazón de la personas.
El tiempo que pasaba allí, lo aprovechaba para escribir en su cuaderno las interminables aventuras de sus personajes. Pero su retraída personalidad le imposibilitaba tomar coraje para presentar sus cuentos y sus libretos en algún concurso o entregárselos a algún director de tantos que pasaban frente a sus narices cada semana.
Ninguno de sus amigos sabía de qué se trataban los escritos en sus cuadernos, mejor dicho su único amigo, aquel que queda de la infancia, aquel que siempre lo defendía cuando era victima de las bromas de sus compañeros. Tampoco lo sabía María, la joven que hacia tantos años Juan amaba en silencio, ella era la musa de muchos de sus poemas. Nunca se animó a hablarle, solo la veía pasar cuando entraba y salía del teatro y a cuando contadas veces, iba a ver algunas de las obras en las que actuaba y hasta a veces tocaba el piano.
Juan pasaba los escritos en su computadora personal y los imprimía para llevar algunos de sus preferidos en la mochila, muy pocas veces tomaba coraje y se los mostraba al profesor Gandara, un viejo y gordo escritor, al fin la única persona en quien confiaba, fuera de su familia.
A Gandara lo admiraba. Era un hombre notable, destacado en la literatura, pero humilde. El hombre que Juan agradecía a Dios haber conocido, el que lo alentaba a seguir trabajando y a hacer el esfuerzo para entrar en la Universidad. Habían establecido casi una amistad y era la persona indicada que podría ayudarlo en el camino que Juan quería tomar.
Juan temía mostrar sus textos, porque creía que eran hojas sin sentido. Solo unas copias de algo que pretendía ser un libro y que lo limitaba en el soporte de sus escritos. Limitaciones negativas. No quería que consideren que sus hojas estaban sumergidas en un mar de otras irrelevantes hojas y automáticamente se volvieran insípidas. Muchos de esas copias se encontraban sueltas y se perdían en el interior de su mochila. Las que llevaba consigo últimamente eran dos: una obra de teatro titulada “Aparato Ideológico” escrita exclusivamente para María. Soñaba cada noche en la interpretación perfecta que María podría hacer. Además, tenía consigo, varios cuentos fantásticos que pretendían ser un libro.
Una de las tantas noches que Juan llegó a su casa, notó algo liviano su mochila, pero con el cansancio del día no le dio importancia. Sacó del bolso sus copias y las guardó resignado, como tantas otras veces, en el armario del olvido, allí donde iban todas las obras cuando se cansaba de trabajar en ellas.
Seis meses después una tarde como siempre sentado frente al teatro, lentamente se fue acercando hacia él la joven más bella que había visto en su vida, estaba radiante y fresca, mas atractiva que nunca, es decir, María. Nervioso no sabia que hacer, pero algo extraño sucedió en él; todo sus miedos, nervios y timidez parecían no existir parecía otra persona. Ella le entrego un folleto y lo invito a ver la nueva obra que iba a estrenarse, una superproducción del director más glamoroso de los últimos tiempos. Y él le dijo: si tu vas a estar en ella va a ser una obra maravillosa te lo aseguro, siempre vengo a ver tus obras y eres perfecta. Ella se sonrojó y sonriendo le dijo –gracias, sé que vienes y con que tu vayas a verme para mi ya será maravilloso - Ahí estaré, contesto. María se alejo mirándolo de reojo y Juan volvió felizmente a su casa.
No podía salir del asombro, Juan nunca imaginó tremenda situación. Al entrar abrazo a su hermana. Estuvieron sentados a la mesa toda la noche hablando sobre su buenaventura, mientras recibía consejos amorosos de parte de ella.
El día de la función llegoó, ansioso por ver a María. Sentía que era una noche especial. Vestido de smoking, había planeado mil formas para acercarse a ella esa noche y conquistarla. Sentado en primera fila. Solo quería apreciar a la actriz no le importaba la historia.
La obra comenzó, era una historia atrapante que despertó lagrimas y sonrisas en los espectadores. Sin lugar a duda era un éxito absoluto, donde cada personaje lograba un lucimiento especial. Los comentarios, eran conmovedores y halagadores. Pero no le ocurrió lo mismo a Juan. Misteriosamente conocía de principio a fin cada palabra, cada movimiento y, justamente, el personaje parecía escrito para María
Juan corrió hasta su casa. Revolvió cada rincón del armario, cada lugar de su casa y no encontró nada. Volvió al teatro y observo como al final de la obra aplaudían a ella y quién se encontraba su lado. El supuesto autor de la obra, la misma obra que Juan había extraviado misteriosamente en el aula aquel día, la misma obra por la cual su profesor Gandara ganaría millones y recorrería el mundo.
Un día, tantos recuerdos”


El 2 de abril fue declarado "Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas". Un feriado conmemorativo inamovible, recuerdo de los horrores cometidos en año 1992, cuando enviaron a jóvenes inexpertos a la fría y cruda guerra del Atlántico sur
Algunas personas solo recuerdan y disfrutan de este feriado como un día de descanso sin trabajo, ellos no comprenden que es una fecha de luto, no de festejo, donde muchos jóvenes aprovechan para ir a boliches y festejar el “día libre”. Es una fecha para rendir tributo a quienes lucharon y murieron en las islas Malvinas.
El día jueves dos de abril del corriente año en el partido bonaerense de Merlo se realizo un acto que fue organizado por lo propios veteranos de Malvinas y uno de tantos soldados (error de concepto: soldados ¿ o conscriptos?) que estuvieron y sufrieron el campo de batalla dijo en su discurso: …“Aunque no haya nadie que recuerde, yo recuerdo porque yo estuve ahí”… o mejor dicho ellos sufrieron allí. Pero de aquel “infierno” que padecieron en la guerra no sólo queda el horrible recuerdo: los sobrevivientes que quedaron heridos físicamente y psicológicamente, quedaron con secuelas y traumas que no le permiten llevar una vida normal. Ellos son los grandes que defendieron la patria, una patria que los defraudó:…“sentimos que no es el mismo país por el cual estuvimos dispuestos a exponer lo mas valioso de cualquier ser humano, nuestra vida.(la) Es el mismo sí, el de la formas el de las apariencias. Por ejemplo, tiene el mismo nombre, aparentemente el mismo contorno, los mismos límites, o eso creemos, aunque no sabemos por cuanto tiempo más. Posee la misma casi infinita variedad de matices geográficos, pero la mayoría de esos verdaderos parámetros naturales ya son propiedad privada de algunos cuantos extranjeros, que con plata que no es la nuestra, han podido comprar todo: tierras, ganado, aguas…”
Esto demuestra la bronca de la in entendible acción de hacer la guerra y mandar al muere a cientos de jóvenes para defender la tierras del atlántico sur cuando en las que vivimos hoy, las están regalando y hasta dejan sin hogar echándolos de sus propias casas, a los pueblos y tribus originarias, como ocurre el norte argentino.
Aunque sientan orgullo y honor de haber sido protagonistas de semejante desafío, también sienten que los ignoran, bronca, discriminación a la hora de conseguir empleo. Porque fue una lucha en vano.
Estos son chicos que fueron a Malvinas y volvieron siendo grandes en la historia.
Muchas palabras, pocos textos

Nunca tuve buena relación con la escritura personal, no existieron diarios íntimos o agendas personales en tanto en mi niñez como en mi adolescencia. Sólo escribí para tareas escolares o algunas cartas a mis amigos cuando me mude por unos meses, pero con ayuda, es que tan solo tenía 6 años.
Lo que recuerdo el primer cuento que escribí, fue en tercer grado, y me sentía orgullosa de haber creado una historia yo sola, aunque el cuento se trataba de un castillo y una princesa (como son todos los cuentos típicos para esa edad). El cuento debe estar guardado con mis cuadernos de la primaria.
Cuando cumplí diez años una compañera de la escuela me regaló un diario íntimo, pero escribirlo duro tan solo un día, no me gustaba hacerlo. Principalmente porque no quería que mis hermanos lo encontraran y lo leyeran, me daba vergüenza.
No recuerdo haber escrito algo desde ese tiempo hasta la secundaria, tengo muchas cartas guardadas de mis amigas pero ellas de mi no tanto, siempre me reprochaban que nunca se las respondía. Pero yo sentía que era mejor decir las cosas que escribirlas, si las veía todos los días.
Cuando llegue a segundo del polimodal, tuve una materia que se llamaba periodismo, hice algunos artículos para el periódico que le tocaba hacer a nuestro curso dos veces por año, pero no recuerdo de que se trataban. Lo que me gustó de ese taller periodístico, fue que un día nos pidieron que hagamos una nota biográfica de alguna compañera y me encanto hacerla, el titulo era “Quiero estar de boca en boca”, porque la entrevistada quería que todo el mundo hable de ella. Parecía que la nota se trataba de una vedette.(mas)
En el último año del polimodal también escribí notas para el periódico junto a otras compañeras, pero no fue relevante. Ese mismo año en la sociología nos hicieron redactar nuestra Historia de vida, la mía no estaba muy completa porque debíamos entrevistar a nuestra maestra de jardín y de la primaria, pero me imaginé que teniendo tantos alumnos no me iban a recordar. Eso fue lo último que escribí que recuerdo.

jueves, 30 de abril de 2009

Girmania Goi


Antes que payie lell tiempo
en Girmania Goi
resipero le cq´ hast susaido
y despero que viague postoi.
Voleaban ávilas en lell Celio celesfer
y lall muchalgente camipasaba trancalma
hasta que al oyer
cómo terrobombas cayían seguidadmente
razopenzaron en adentremerse en refugicasas
razopensando en subsilvar
sus humavidas en ahiesas fortaleziones con lolls otros
humaseres que camipasaban ailí, pahra estarse segurosalvos
hasta que termicesasen lolls sacumblores y lell
temigroso insmomento.
Avida en nonosellos ahoya un noviejo vacieco
Yaq´ nono aheran lolls
iguismos que en otinto miempo reíaban y
cuando lell solastro aparelió dennoevomente
deseeron collenar lell
vacieco retorciándolo en morter.